derecha y sotana: ¿la lista del mañana?

El ejemplo del obispo Piña ya dio frutos: en Formosa, el párroco de Las Lomitas, Francisco Nazar, fue elegido para presidir el Foro de la Democracia para la Recuperación de la Ciudadanía, que se opone a la reelección indefinida del gobernador, (a la sazón, Gildo Insfrán).
El cura parece un gran tipo, siempre cerca de los pobres y los aborígenes; nadie le discute sus virtudes de pastor. Pero cuando dice que “nadie es dueño de la verdad ni de las personas” o que “la perpetuación en el poder atenta contra la dignidad del hombre”, ¿le da un ataque de amnesia frente a lo que hace la Iglesia católica, la suya? Cuando papas, obispos y curas se entrometen en la vida de la gente, ¿habrá ido Nazar a decirles que nadie es dueño de la verdad? Cuando la Iglesia presiona para acceder a espacios de poder político y desde ahí manejar temas que son de su interés (como en educación, en cuyas estructuras la Iglesia sostuvo sus espacios durante gobiernos de todo tipo y color), ¿no atenta contra la dignidad? Qué raro… Yo pensaría que también.
De convocarse a una constituyente para frenar los bríos reeleccionistas del gobernador de Formosa, quizás Nazar se postule a convencional.
¿A cuántos curas más deberemos ver contándonos el cuento de sus buenas intenciones para darnos cuenta de que la Iglesia está metiéndose de lleno en el campo político?