martes, octubre 09, 2007

llamado a la solidaridad

No logro entender. Por eso solicito que si por aquí pasa un o una kirchnerista o un o una economista que se identifique con este ¿modelo?, tenga la amabilidad de explicarme que si eso de que “el cambio recién empieza“, sumado a aquello de que “ganar dinero no es pecado” (frase que le devolvió el sueño a los hombres del mundo empresarial y financiero argentino que hace años no dormían por la angustia que les generaba estar en falta), más la reducción de los imponibles de los impuestos progresivos y la devolución de parte de lo cobrado, la distracción de seguir sin aplicar gravamen alguno sobre los movimientos financieros y bursátiles, seguir manteniendo el IVA en el 21% y ni pensar en borrar del mapa de los ingresos públicos todos los tributos regresivos, aplaudir la concentración económica y la extranjerización de empresas y presentarnos esas maniobras como “inversiones que regresan al país”, la negación de la inflación que –a su vez– le sirve a la oposición para exagerarla (se nota que ni Ricardo ni Néstor ni Mauricio van a hacer las compras), la falta de créditos hipotecarios a la medida de quienes los necesitan, la pasividad ante el delirio de los precios de los alquileres, el presentar como una buena noticia el aumente del consumo que es empujado por las compras suntuarias, la política de nulo control que se aplica a las empresas de servicios, el no haber tomado una sola medida tendiente a no permitir el descarado crecimiento de la brecha entre ricos y pobres, por favor, si alguien puede, que me explique si todo eso significa que lo que viene es un giro a la derecha, la punta de lanza del neoliberalismo versión 2K (segundo milenio; ¿qué pensaron?), un guiño para mostrarse cercanos al establishment pese a que algunos de sus viejos amigos están siendo nombrados para ser llevados a juicio por crímenes de lesa humanidad, o simplemente se trata de la invitación oficial al saqueo final.
Quien pueda colaborar, deje su comentario. Desde ya, muchas gracias.