miércoles, septiembre 27, 2006

alivio, pero no festejo

La muerte de un hijo de puta no es motivo de festejo, porque la muerte no trae consigo ningún tipo de justicia ni para con él ni para quienes fueron afectados por su accionar. Pero sí puede provocarnos un alivio, porque al menos ya no deberemos preocuparnos más por el mal que generaba ese hijo de puta.
Eso es lo que tengo para decirles esta madrugada, mientras me preparo para sentir un alivio que, tarde o temprano, llegará: el quebracho y el algarrobo tampoco son eternos.

8 Comments:

At viernes, septiembre 29, 2006 12:09:00 p. m., Blogger Bruno Bimbi said...

Yo sé que suena feo hablar de festejo, pero en mi casa, cuando murió Ramón Camps, mi vieja compró una botella de champán. Creo que tiene otra preparada para cuando muera Pinocho.
Y para el Carlos, supongo, habrá que acompañarla con unas porciones de pizza.

 
At viernes, septiembre 29, 2006 1:04:00 p. m., Blogger Lucho Bordegaray said...

No se trata de que “suene feo”, Bruno. Si apenas eso fuese el problema, estaríamos en uno más grave, porque nuestra ética se hubiese convertido en estética, como todavía pretende hacernos creer el mamarracho de Jorge Asís...

 
At viernes, septiembre 29, 2006 8:15:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

que es la etica sino una estetica del comportamiento, dijera la simone de B. en la unica frase suya que me cayo simpatica...
a propos... quien se murio?

 
At viernes, septiembre 29, 2006 10:50:00 p. m., Blogger donnie said...

Por cada hijo de puta muerto, nace otro manojo de hijos de puta, como las margaritas (o los cardos).

Siempre los hubo, siempre los habrá, y suelen descompensar la balanza porque su hijoputez viene en tanta proporción (esencia de hijoputez, diría) que nos deja a todos pintados.

Igual, todos tenemos dentro nuestro pequeño alien, golpeando su cabecita rapada del otro lado del estómago. Todo depende de nuestra salud digestiva.

 
At sábado, septiembre 30, 2006 1:27:00 a. m., Blogger Bruno Bimbi said...

Tenés razón, pero... ¿te parece antiético alegrarse de la muerte de Camps? Digo, ese hijo de puta no hizo más que asesinar y torturar, por mí está bien muerto. ¿Menem? Cuántos pibes se murieron de hambre por su culpa. Yo creo que el mundo sería un poquito menos peor sin ese reverendo hijo de puta.
¿Por qué la muerte tiene que unificarnos de la vereda de enfrente? ¿Sólo porque a todos nos va a tocar y no nos gusta? Bueno, a mí tampoco me gusta que me tenga que tocar o que le toque a personas que quiero. Me apena la muerte de las personas buenas, aun cuando no las conozca. Pero si se muere Pinochet yo levanto mi copa y brindo porque hay un poco menos de mierda contaminando el medio ambiente donde me toca vivir.

 
At sábado, septiembre 30, 2006 9:02:00 a. m., Blogger Grendel said...

Qué triste es que un país tenga que festejar la muerte de un delincuente y genocida económico como Menem, en lugar de estar satisfechos con que la justicia lo condenó de por vida a pudrirse en la cárcel, como debería haberlo hecho con él y con Cavallo, Kohan, Alemann, De la Rúa, Duhalde, etc...etc...etc...etc...

 
At domingo, octubre 01, 2006 10:29:00 p. m., Blogger donnie said...

Sep, Domselaar... lástima que nuestra "cadena perpetua" es de apenas 25 años, y terminan siendo muuuuchos menos.

 
At martes, octubre 03, 2006 12:06:00 a. m., Anonymous Anónimo said...

Lucho...Quisiera algun Posteo, sobre la prohibición de fumar en los lugares cerrados...

 

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